Entonces terminé de quitarme la ropa y me puse juntitito de él para que sintiera mi piel en su espalda desnuda, comencé a besarle cada centímetro de su espalda y a acariciar suavemente su sexo... cuando lo vi con los ojitos cerrados me dije a mi misma: no que no. Él quería responder mis caricias haciendo lo msimo, pero no!!! no lo permití y mejor decidí hacerle oral... uy me lu
cí creo que nunca lo había hecho tan bien, su carita le cambió y me excitaba verlo. Cuando sentí que él estaba a punto de acabar, me puse arriba de él y enseguida tuve un orgasmo. Seguimos haciéndolo y tuve como en 20 segundos otro más. Mi cuerpo sentía placer por todos lados. Y entonces él terminó. Fue increible. Yo siempre he dicho que afortunadamente tengo un muy buen amante como esposo, pero esta vez fue algo diferente, rico, cachondo. He concluido que después de 4 años de vivir con él esta ha sido de las mejores noches, eso es bastante bueno... como un momento así puede cambiar un poco la monotonía en las que a veces se convierte el matrimonio...